domingo, diciembre 25, 2016

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El silencio se impone en este día de celebración familiar, al menos, destaco de este el silencio, que felizmente es también social. Todo indica que el barrio duerme y dormirá hasta tarde. Los rayos solares imponen su presencia, mi cuarto y mi sala configurados de un naranja disipado. Me instalo en la mesa y Onur se posa a mis pies, me basta verlo para percatarme de que necesita un corte de pelo, pese a que no tiene el pelambre corto, empero la temperatura animal es distinta, más caliente que la aquel animal que se desplaza en dos extremidades.
Busco en Spotify un álbum ideal para este día de recogimiento mental, pero tampoco pienso mucho, ya que se impone el Cerulean de The Ocean Blue. Si existe un día ideal, al menos para mí, para volver a este álbum, ese es precisamente un día como navidad. Ciertos álbumes se ajustan a sus días, en especial cuando estos son de recogimiento, o algo que se le parezca, siempre y cuando el hueveo sea lo que se imponga. Entonces presiono Play, programo la opción Repeat y en compañía del primer café del día, me lanzo a los remansos armónicos del álbum, mientras doy el primer sorbo y abro los archivos que venía trabajando, sea escribiendo o editando, pensando en lo que hablaba con mi sobrina Gianella el día de ayer, que mañana cumple quince años, y como sobrina mía, inteligente, ha decidido no celebrar con una olvidable fiesta, sino con un viaje que realizará en un par de meses cruzando el charco. 
Sin duda, uno de los archivos que vengo trabajando es el recuento, y sé lo no poco que “algunos” esperan de mis recuentos literarios, de este salvaje ejercicio de memoria, pero su escritura es también una batalla contra los bloqueos, y no es que un recuento me bloquee, solo que tengo que estar en onda con mis sentidos activados, y cuando los sentidos no están activados, como bien anotó un poeta peruano ochentero, y con acierto: “en estado de poesía”. Entonces, me dispongo a activar sentidos, en especial memoria, en pos de avanzar 1000 palabras más del texto y tenerlo acabado en los próximos días y así poner orden en este corral de chanchos literarios, bueno, en un corral de chanchos se ha convertido la literatura peruana actual.

1 Comentarios:

Anonymous Anónimo dijo...

https://youtu.be/8v_4O44sfjM

7:49 a.m.  

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